Dusan Petkovic

Escrito el jueves, 24 de septiembre de 2009 ·


Lo malo de tener un padre futbolista es que siempre te van a comparar con él. Ilija Petkovic fue un gran futbolista yugoslavo que entre 1968 y 1974 defendió 43 veces la casaca yugoslava. A parte se convirtió en un ídolo en el OFK de Belgrado, club al que defendió en 417 partidos anotando 68 goles. Además, como no solo de fútbol vive el hombre, en sus ratos libres tuvo tiempo de completar estudios en ciencias económicas.

Está claro que teniendo un padre así, Dusan Petkovic, nacido el 13 de junio de 1974 en Belgrado, lo iba a tener difícil siempre. Como no podía ser de otra forma, nuestro aguerrido jugador que traemos a la palestra hoy, empezó su carrera de la mano de papá en el OFK de Belgrado, club en el que entre 1992 y 1995 jugó 26 partidos anotando su primer gol profesional. Su percha física, o sea, el ser un armario ropero de 191 centímetros de altura le condenaron a una vida como defensa, que casi siempre es menos agradecida que la de delantero goleador.

Como ya he explicado mil veces en este blog, el Mallorca 1995/1996 era una mezcla entre la ONU y un vodevil, con jugadores que entraban y salían de la plantilla de un día para otro. En estas, en los primeros días de enero de 1996, el intermediario y representante de jugadores José María Minguella informó a Víctor Múñoz y Pichi Alonso que tenía en su cartera a un joven y prometedor jugador yugoslavo de apellido Petkovic. Supongo que ni hizo falta aclararles que no se trataba del conocido como "Rambo" Petkovic, si no otro con menos aspiraciones. Al parecer a ambos les entra por los ojitos el espigado mozo yugoslavo y, con 21 años, desembarca en Mallorca donde es presentado el 4 de enero de 1996. Procedente del OFK de Belgrado llega cedido hasta final de temporada. En el Mallorca es utilizado mayormente como pivote defensivo, debutando el mismo día que Zoran Masic, el 21 de enero de 1996, en partido contra el Osasuna. En mi memoria aún resuenan las palabras de cierto comentarista técnico muy conocido en la isla y en el San Francisco sobre todo (vale, es Pep Sansó), en una retrasmisión radiofónica desde el Salto del Caballo de Toledo el 18 de febrero de 1996 cuando en una victoria por 0-4, en la que era la tercera aparición del yugoslavo con el Mallorca, aseguró muy asombrado por las evoluciones de Petkovic en los apenas 20 minutos que estuvo sobre el terreno de juego que "aquest tio és boníssim". Solo consiguió hacerse con la titularidad en los cuatro últimos partidos de liga, pero al llegar el momento decisivo de la temporada, la promoción de ascenso contra el Rayo Vallecano, los entrenadores decidieron no darle ni un minuto. Con el Mallorca disputó 12 partidos, 7 de los cuales apareciendo desde el banquillo. En los 540 minutos de los que dispuso demostró ser un jugador fuerte y que no se arrugaba ante los rivales, ímpetu que le supuso recibir dos tarjetas amarillas. Sin embargo todo esto no le sirvió para continuar en el club bermellón. Según Víctor Muñoz, "problemas personales que debe resolver" le dejaron fuera del stage de pretemporada de Arhem (Holanda) la temporada siguiente. Y, definitivamente, no debió poder resolverlos ya que volvió al OFK de Belgrado donde disputó 16 partidos anotando 3 goles la temporada 1996/1997.


En 1997 hizo las maletas y se largó a Japón a jugar en el Yokohama F. Marinos, quién sabe si para huír de la sombra alargada de su padre. Allí en dos años disputó 12 partidos en la J-League anotando 1 gol, dejando claro que el sushi y el sake no es lo suyo. Y de nuevo vuelta a casa, al OFK de Belgrado, donde entre 1999 y 2001 juega 32 partidos anotando 4 goles. En julio de 2001 le llega la posibilidad de seguir su carrera en Alemania y el espigado chaval no se lo piensa. Ficha por el VFL Wolfsburg, club en el que debuta en partido oficial el 11 de agosto de 2001 con derrota por 4-0 en el campo del Borussia Dortmund, recibiendo una tarjeta amarilla a los 27 minutos del poco afortunado debut. Ese año a penas juega 4 partidos y la temporada siguiente es cedido al 1 FC Nuremberg, donde disputa 22 partidos anotando 2 goles. La temporada 2003-2004 la inicia de nuevo en el VFL Wolfsburg, pero el ostracismo al que es sometido le lleva a finalizar la temporada en Rusia, en el Spartak de Moscú, donde en 12 partidos anota 2 goles. Al año siguiente nuestro querido trotamundos del fútbol vuelve a casa, al OFK de Belgrado, donde juega 5 partidos anotando 1 gol.

En el verano de 2006 se disputa el Mundial de Alemania. Serbia se ha clasificado para el evento con Ilija Petkovic en el banquillo. El delantero Mirko Vucinic se lesiona en el Europeo Sub-21 de Portugal cuando había sido seleccionado también para disputar el Mundial. Petkovic, tal vez empujado por la sangre, convoca el 21 de mayo de 2006 a su hijo Dusan Petkovic para sustituir al delantero. Esta decisión no es entendida ni compartida por la prensa serbia. Primero por sustituir a un delantero por un defensa y segundo por ser el defensa quien es. Ilija se defiende diciendo que Dusan es un jugador versátil que puede dar rendimiento en varias posiciones. Dusan Petkovic había sido ya 7 veces internacional, demostrando lo barato que es ser internacional serbio, produciéndose su debut el 13 de diciembre de 2000 en un partido amistoso contra Grecia que acabó con empate a uno, dándose la curiosidad (para el mallorquinismo) que el gol plavvi lo anotó Angelos Basinas en propia puerta. Dusan Petkovic no aguanta la presión a que es sometido por la prensa durante la fase de preparación del Mundial, a pesar de ofrecer un buen rendimiento durante los partidos amistosos previos (llegando incluso a anotar algún gol) y renuncia a jugarlo. Decisión de la que se ha arrepentido el resto de su vida "es el sueño de cualquier jugador, si el seleccionador hubiera sido cualquier otro y no mi padre, me habría quedado". Así fue como Serbia afrontó el Mundial con un jugador menos al no poder sustituir a Petkovic. Por cierto, menos reparos tuvo el croata Niko Kranjcar en disputar dicha competición siendo su padre Zlatko el seleccionador croata.

La temporada 2006/2007, para ahogar las penas en el frío, volvió a la liga rusa para jugar en el Saturn de Moscú, equipo en el que en 10 partidos jugados no consiguió anotar ningún gol. En agosto de 2007 estuvo a prueba en el New England Revolution de Boston de la MSL, pero no llegó a estampar su firma con los pupilos de Steve Nicol al lesionarse en su segundo entreno y ser descartado. Desde entonces es un agente libre que, con 35 años, bien debe estar pensando ya en una digna retirada.

1 comentarios:

Gontxo dijo...
25 de septiembre de 2009, 20:29  

Yo tb le tenía en mente para un futuro artículo desde que ocurrió aquello del mundial 2006, y me enteré que era el mismo que estuvo en el Mallorca. Pero nunca me animé en exceso y no tenía los datos de los partidos... igual te utilizo de fuente y me animo.

Un saludo Xesc!

Publicar un comentario

Contacto

Twitter: @soydelmallorca

Email: soy_del_mallorca@hotmail.com

¿Me ayudas?

Busco nombres completos, fechas de nacimiento, lugares de nacimiento (y en su caso de fallecimiento) de jugadores que hayan jugado en el Mallorca entre 1916 y 1959; o entre 1975 y 1980.


¿Tienes algún listado antiguo? ¿Eres algún ex-jugador? ¿Eres familiar o conocido de alguno? Puedes contactarme por cualquiera de los métodos antes descritos.


Estado de la búsqueda a 26/12/2013: 702 de 1024 completados.

Sobre esto

NO PUEDO ASEGURAR UN RITMO CONSTANTE DE ESCRITURA, HAGO LO QUE PUEDO CUANDO PUEDO. PACIENCIA. SALUD.


Hay cosas que intento olvidar pero no puedo. Mi memoria me persigue. Soy seguidor del Real Club Deportivo Mallorca desde el año 1980. Soy tan idiota que soy capaz de recordar goles, alineaciones, partidos y anécdotas varias de todos estos años. Mi novia dice que si hicieran un concurso sobre la historia y anécdotas del Mallorca lo ganaría sin ninguna duda. Pero yo creo que hay gente que sabe mucho más que yo. Y, además, soy tan tonto que mi única pena es no haber visto jugar a mi equipo en la mítica campaña de Tercera División. Yo me incorporé en Segunda B, aunque de niño recuerdo haber visto mi primer partido en el Lluís Sitjar el 26 de mayo de 1974, un famoso (¿solo para mí?) Mallorca - 1 Burgos - 0 de la última jornada de esa temporada en el que nos jugábamos salvarnos de la promoción de descenso a Tercera Divisón. Aunque tengo buena memoria, para algunas fechas y datos tengo que tirar de hemeroteca. Espero que disfrutéis conmigo de este viaje por mi historia ...

¿Un partido memorable?

Nick Hornby, en su libro "Fiebre en las gradas", radiografió perfectamente los 7 ingredientes que un partido de fútbol puede tener para que pase a tener la consideración de memorable y pase a engrosar la lista de partidos que se recuerdan para siempre. Puede aparecer un solo ingrediente o varios juntos.
1. Goles. Tantos como sea posible que uno recuerda mejor un 7-1 que un 1-0.
2. Lamentables errores arbitrales. Y mejor que mi equipo sea la víctima de los mismos, le da más dramatismo.
3. Un público bullicioso. Por ejemplo, el calor de la grada al remontar un 0-2 es algo incomensurable.
4. Condiciones meteorológicas adversas. El barro, la lluvia, el frío extremo hacen los partidos más heróicos.
5. Que el rival falle un penalti. Y si es decisivo, mejor.
6. Que un jugador contrario sea expulsado. Siempre que no sea demasiado pronto, porque esas deslucen el partido.
7. Algún tipo de incidente desgraciado. Y aquí entramos en un resbaladizo terreno moral.

Entradas Recientes

Seguidores