Corría el verano de 1996. El Mallorca de Beltrán había fracasado en el primer intento de ascenso en la maldita promoción ante el Rayo Vallecano y había que relanzar el equipo con nuevos jugadores que ilusionaran a la parroquia barralet. Uno de ellos fue Horia Radu Niculescu. El delantero rumano, nacido el 2 de marzo de 1975 en Sibiu, formado en las filas del FC Inter Sibiu, había jugado la temporada anterior en el National de Bucarest donde había marcado 12 goles en liga y, a sus 21 años, era considerado una de las promesas más fuertes del fútbol rumano y ya había debutado dos años antes, en 1994, en la selección absoluta de su país junto a Gica Hagi, George Popescu, Dan Petrescu, Florin Raducioiu, Ilie Dumitrescu y compañía marcándole un gol a Bolivia.
Nada más aterrizar en Palma fue presentado en el viejo Lluís Sitjar a bombo y platillo como la gran estrella fichada para la temporada 1996/1997 y cuatro temporadas más. Sin embargo, al día siguiente de ser presentado, se volvió a su país alegando graves problemas psicológicos de uno de sus hermanos. Tras dar la espantada en el Mallorca volvió al National de Bucarest y pasó también por el Rapid de Bucarest, el Steaua de Bucarest, el Ankaraguku y el Galatasaray de Turquía. Se retiró en el año 2004 en el Changchun Yatai de Corea. En total fue 14 veces internacional por Rumanía y participó en el Mundial de 1998 de Francia en 2 partidos contra Colombia y Croacia. Otra gran promesa del fútbol rumano que se quedó por el camino como tantas y tantas veces sucede.
1 comentarios:
Pufff!!! Esta jugador que ya corresponde a mi epoca de seguidor del Mallorca y tengo recuerdos de esa temporada, no le tenía en mente. No sabía la espantada que protagonizó este jugador.
Luego supongo que no llegó a nada, pero se presentó con 21 años y buenas cifras. PEro bueno... que se le va a hacer, se consiguió el ascenso sin él.
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