Son las 17 horas del domingo 24 de marzo de 1996. Anselmo José Sanabria Cruz, a sus 21 añitos, está como un niño con las botas nuevas sobre el césped del Lluís Sitjar y con una camiseta roja del Mallorca con el dorsal nº 26 a la espalda que indica que es el cuarto jugador con ficha del Mallorca B que va a jugar esa temporada después de Manolo Moyá, Juanjo Doblas y Josemi Pérez. Durante toda esa semana ha estado entrenando a las órdenes de Víctor Muñoz Manrique junto a su compañero del B Juan Ramón Rodríguez. El sábado salta la noticia de que Rodri no puede jugar con el primer equipo porque si lo hiciera su edad (24 años) le impediría volver a alinearse con el Mallorca B. Así que será Anselmo quien cubra la plaza vacante en el flanco derecho de la alineación titular del Mallorca debido a lesiones y sanciones.
Para la historia la alineación inicial de ese domingo de marzo frente al Alavés: Kike, Dani, Olaizola, Marcelino, Raúl, Anselmo, Soler, Copado, Stankovic, Masic y Vidal. En el descanso el partido seguía con el empate a cero inicial y Víctor Muñoz decidió prescindir de Anselmo para dar entrada a un renqueante Maqueda. Tan renqueante que solo duró cuatro minutos en el campo y tuvo que ser sustituído por Julián Ronda. El Mallorca acabó venciendo por 2-1 y Anselmo disputó sus únicos 45 minutos oficiales con el primer equipo. La enorme presión y la necesidad que había en el club por conseguir el ascenso a Primera División sí o sí le privaron de tener el espacio suficiente para ir creciendo y madurando como futbolista profesional. Si el Mallorca de aquella época hubiera estado consolidado en Primera División posiblemente habría tenido más oportunidades, pues técnicamente era un delicia de jugador, digno de la categoría de oro del fútbol español.
Tras haber jugado 3 temporadas en el Mallorca B, de las cuales dos en Tercera y la última en Segunda B (con debut en el primer equipo), Anselmo José Sanabria Cruz, natural de Sevilla aunque mallorquín de adopción, probó suerte en la U.E. Figueres de 2ª B, equipo en el que estuvo una sola temporada para regresar a las islas donde transcurrió el resto de su carrera futbolística: una temporada en 2ª B en el Sóller, después jugo dos temporadas en el At. Baleares y dos en Vilafranca, dos más en el Ibiza, de donde regreso para fichar por el Manacor, desde donde paso al Felanitx para después fichar por el Alcudia donde estuvo cuatro temporadas hasta su retirada a los 35 años en mayo de 2010. Anselmo, mediapunta con un exquisito trato al balón y que no le hacía ascos a la portería rival, jugó en estás 17 temporadas 510 partidos de liga en los que consiguió anotar 204 goles. Hasta en el día de su despedida tuvo una anécdota y es que, cuando iba a ser sustituído cerca del minuto 90 se lesionó un compañero y tuvo que ser sustituído éste y no él y era el tercer cambio. Sin embargo él igualmente abandonó el terreno de juego (aún dejando a su equipo con 10 jugadores) en el minuto 90, dándole su última camiseta a su hija.
Las últimas noticias lo señalan al frente del fútbol base de la U.E. Alcudia.